La comida medieval: descubriendo la gastronomía en la Edad Media a través de sus ingredientes, costumbres y curiosidades

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En comida medieval los ingredientes y procesos de preparación eran limitados. Debido a esto, la gastronomía en la Edad Media se vio en la necesidad de buscar formas ingeniosas de mantener los alimentos en buen estado y de cocinarlos de manera eficiente.

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Comida Edad Media: ¿Qué se comía en esa época?

La comida medieval era bastante diferente a la comida de la época actual, porque había una menor variedad de productos para el consumo diario. La mayoría de las personas vivían en zonas rurales y sembraban lo que se comían o criaban animales, para obtener: carne, leche y huevos, entre otros.

En las ciudades, las personas podían comprar en los mercados que contaban con diversos ingredientes para cocinar. Pero, ¿cómo eran los mercados en la Edad Media? Lo primero que hay que destacar es que no eran un ejemplo de salubridad, los malos olores podían percibirse en cada rincón, debido a que se mezclaba mercancía fresca, que era difícil de conservar, con animales como cerdos, gallinas, cabras y otros; que estaban disponibles para la venta.

Dentro de los mercados se podían hallar los principales ingredientes que estaban disponibles en esa época, y que eran esenciales para cocina medieval. A continuación, se mencionan algunos de ellos:

Comida medieval: Los cereales

El trigo, la cebada, la avena, el centeno y el mijo eran los cereales más consumidos. Generalmente, se utilizaban para preparar pastas y panes. El arroz se usaba poco, debido a que era muy costoso y solo se cosechaba en algunas regiones de España e Italia.

El pan que consumían las clases sociales altas era de mayor calidad, se elaboraba con harinas refinadas. Por su parte, los más pobres, comían uno con productos menos finos, por lo que su color era más oscuro.

Vegetales y frutas

Vegetales como las zanahorias, cebollas, coles y remolachas eran de los preferidos por las personas del medioevo. Usualmente, se consumían en estofados como acompañantes de las carnes o en sopas.

Las frutas también eran muy demandadas, por lo general se comían frescas, porque hacerlas en conserva era muy costoso, debido a los elevados precios del azúcar y la miel. En la zona norte del continente europeo las frutas favoritas eran las peras, manzanas y ciruelas, mientras que en el sur eran las naranjas, las uvas y los limones.

Gastronomía en la Edad Media: Las carnes

Uno de los ingredientes básicos de la comida de la época medieval era la carne. La mayor parte de lo que se consumía provenía de animales domesticados, como el cerdo. Esto debido a que era un animal que no requería un cuidado especial, podía estar libre sin problemas y era alimentado con restos de la comida de los humanos.

La carne de vaca y buey era menos popular, debido a que estos animales tenían más valor, porque eran usados para transportar cargas pesadas. Solo se les sacrificaba cuando estaban viejos.

Las aves también eran un producto demandado, pollo, gansos, codornices, cigüeñas y hasta cisnes eran los predilectos de las personas de la Edad Media. Animales como el pato y el cisne solo eran consumidos por las clases más acomodadas.

El pescado

La carne de pescado era otra proteína que formaba parte de la alimentación en la Edad Media. Sin embargo, no era tan demandada como las carnes rojas y de aves. Se comía principalmente en los días en los que era obligatorio el ayuno por motivos religiosos.

En las poblaciones de las costas sí era un ingrediente regular. Pescados, como el bacalao y el arenque, eran los más vendidos. La mayor parte se consumía ahumado o salado, porque era la mejor forma para preservarlo. En el Mediterráneo también se usaban mucho los moluscos como ostras y mejillones en las preparaciones.

Las especias

Las especias eran los productos de la Edad Media que se consideraban como los más costosos. Entre las más populares estaban: la pimienta negra, el comino, la canela y el jengibre, entre otras. La mayoría se importaban de sitios lejanos de África y Asia, por eso eran muy caras.

La especia más exclusiva era el azafrán, y se usaba mayormente para darle color a los platos. Sorprendentemente, este producto sigue siendo uno de los más costosos e importantes de la historia de la gastronomía europea.

Además de las especias, las personas aprovechaban las hierbas que crecían en los campos, como la salvia y el perejil, para darle sabor a sus platos.

Gastronomía en la Edad Media: Costumbres y normas

Al igual que en la actualidad, el ritual de la comida en el medioevo, incluía una serie de normas y costumbres que debían seguirse al pie de la letra, para no ser mal visto por la sociedad. A continuación, se explican algunas de ellas:

División por clases sociales

En la época medieval, la comida servía para delimitar el estatus socioeconómico de las personas. En este periodo, la sociedad estaba divida en tres clases sociales: los plebeyos, que incluían a la mayoría de la población; el clero, en donde estaba toda la jerarquía de la Iglesia; y la nobleza, compuesta por los reyes y sus familias.

Los nobles y miembros de clero comían los platos más elaborados, entre los que se destacaban las mejores carnes, que eran preparadas con las especias más finas. Mientras que los plebeyos, consumían panes duros de cebada, cerdo y habas. En esta época antigua, se pensaba que los miembros de la aristocracia tenían un sistema digestivo más sofisticado, por lo que necesitaban ingerir alimentos de mayor calidad.

Almuerzos, cenas y banquetes

En la Edad Media se hacían dos comidas: el almuerzo, que era la más importante; y la cena, que incluía un refrigerio más ligero. Las meriendas no eran comunes, debido a que la mayoría de las personas no podían pagar por ellas. Asimismo, para los miembros del clero y la nobleza, era mal visto cenar temprano.

Los banquetes en la antigüedad eran considerados como una costumbre inmoral en donde solo se buscaba exponer el lujo. Cuando se hacían en la noche, eran asociados con otras prácticas mal vistas; como los juegos de azar, la ingesta de bebidas alcohólicas y el lenguaje vulgar.

Normas de higiene y etiqueta al comer

Sin duda, una de las grandes interrogantes que puede surgir sobre este periodo de la historia es, ¿cómo era la higiene en la Edad Media? Sobre todo cuando se habla de la alimentación.

En esta época, casi todas las personas comían con las manos, por lo que uno de los hábitos de higiene en la Edad Media más importantes, era lavárselas antes y después de comer. Generalmente, solo se enjuagaban con agua, pero los más pudientes usaban jabón.

Después de comer, se limpiaban los dientes con alguna rama seca, o trozos de tela. Asimismo, cuando se llevaban a cabo reuniones sociales, en las que la comida era la atracción principal, era primordial darse un buen baño y utilizar ropa limpia.

Con respecto al uso de cubiertos, el favorito era la cuchara. También se empleaba el cuchillo, pero cada persona debía llevarlo consigo. En las posadas y comedores se les ofrecía a los clientes más distinguidos, al igual que un paño para lavarse las manos.

Compartir copas y vasos para beber era considerado como una señal de buena educación, al igual que repartir el pan y los alimentos ubicados en el centro de la mesa entre los demás comensales.

Gastronomía en la Edad Media: ¿Cómo se cocinaba antes?

En las cocinas de la época medieval había un espacio destinado para encender el fuego y cocinar los alimentos. Por lo general, se colgaba un caldero encima de las llamas y dentro se cocinaban las carnes y verduras que luego se consumían.

Otro método que se empleaba, era el de ahumar carnes y pescados en unas barras que se colocaban sobre el fuego. Esto se hacía, para mantener en buen estado estas comidas por más tiempo.

Las aves y carnes rojas también se introducían en estacas de madera y eran asadas dándoles vuelta durante varias horas. En los hornos, principalmente se preparaban panes y algunos postres como bizcochos.

Curiosidades sobre la comida medieval

La comida medieval conserva algunas similitudes con los platos que se consumen en la actualidad. Sin embargo, hay muchas costumbres y reglas que hoy se consideran peculiares. Estas son algunas curiosidades sobre la gastronomía del medioevo:

  • En la Edad Media la leche fresca se dañaba muy rápido, debido a que no había forma de refrigerarla, por ello, los más adinerados usaban leche elaborada a base de almendras y nueces.
  • En los hogares más humildes se criaban animales de corral como pollos, gansos y patos para obtener huevos. Solo se sacrificaban por su carne cuando ya estaban muy viejos.
  • Los nobles tenían un espacio en sus hogares conocido como “parque de ciervos”, en el que cazaban para alimentarse y por deporte. Si un plebeyo era capturado cazando en esta zona, podía ser ejecutado.
  • Debido a que las especias eran consideradas un lujo, los más pobres utilizaban hierbas como el perejil y la salvia para aromatizar sus alimentos.

En la cocina moderna hay muchas recetas fáciles que cualquier persona puede hacer, debido a que existen los implementos necesarios para lograr este objetivo. Sin embargo, con la comida medieval esto no era posible. La gastronomía en la Edad Media se caracterizó por tener una marcada división entre clases sociales, que en parte se debió a que muchos alimentos no eran accesibles para la mayoría, por sus elevados precios. No obstante, las personas de la época buscaron las formas de crear platos que resultaran deliciosos para todos.

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